Luz en el Camino Primitivo

HdC. En el inicio de las peregrinaciones a Compostela, cuando los devotos se dirigían a la tumba del Apóstol por la ruta del hoy llamado Camino Primitivo, la ciudad de Lugo era de paso obligado. El peregrino entraba al abrigo de su muralla y callejeaba por las estrechas y tortuosas rúas del Burgo Vello lucense, buscando una luz en cada puerta. Un candelero coronado por una estrella de ocho puntas le indicaba dónde cobijarse y descansar por la noche.

El Pazo das Pombas, construido en el siglo XV en la antigua plaza del Pozo da Pinguela y reedificado en el siglo XVIII, fue albergue de peregrinos durante la Alta Edad Media, hasta que el gran incendio  destruyó buena parte de la ciudad. El edificio convertido hoy en museo recuerda su pasado como hospedería en una vitrina en la que se halla el candelero con la estrella del eremita Paio, usado como señalización de las casas que recibían caminantes de la época. Otras joyas jacobeas son una bula del Año Santo de 1790 del Papa Alejandro III o una  fuente de cerámica de Pickman estampada con la imagen de Santiago de Compostela.

Comentarios

  1. Una pena lo del Pazo de las Pombas.

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  2. ¿Te refieres a que haya pasado a manos privadas, Camino Travel?
    Gracias por tu comentario!

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  3. En realidad que ardiera, y en menor medida que se perdiera la función de hospital.
    Pero por lo menos la gente puede visitarlo como museo

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