HdP. El Camino Inglés discurre íntegramente por Galicia. Y en Galicia el gótico escasea, y sobre todo en el mundo rural. Por eso este puente que permite al peregrino salvar el río Lambre es tan sencillo como excepcional. Al entrar en él queda atrás el municipio de Miño y, al frente, espera el de Paderne, con una pequeña, corta y dura subida que lleva a unas tierras desde las que se domina todo el final de la ría de Betanzos. Una ría surcada hasta el siglo XVIII por barcos británicos que buscaban el excelente vino que aún hay en la comarca.
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