El puente tiene hoy en día 7 arcos, pero fue mayor y presumió de 11. Fue Alfonso VI quien lo mandó construir, y en la actualidad un extremo se fija en la provincia de Burgos y otro en la de Palencia, y abajo, el río Pisuerga. Su estado es excelente, tras el arreglo en profundidad de los primeros años de este siglo.
Una vez en suelo palentino, el primer pueblo ha sido bautizado como Itero de la Vega. No era así en tiempos medievales, puesto que el Camino lo dejaba a un kilómetro de distancia. Ahora se cruza y se sale de él… por pistas de concentración parcelaria. Pero ese pequeño borrón no logra oscurecer el magnífico recuerdo del venerable Pons Fiterie que el peregrino se llevará para siempre.
Un sitio muy especial en el camino de Santiago, sin lugar a dudas
ResponderEliminar